30 sept 2012
Tercer trimestre del segundo año
27 sept 2012
Los resultados de la encuesta
25 sept 2012
Otro estudio más, y van...
23 sept 2012
20 sept 2012
Hombres y mujeres. ¿Pies diferentes?.
Hoy voy a hablar de un tema que desde que me empecé a interesar -y a desinteresar al mismo tiempo- en el calzado deportivo como instrumento y no como mera "decoración corporal", siempre me ha parecido curioso. Voy a compartir con ustedes las preguntas que me he hecho al respecto: - ¿Por qué hay modelos de zapatillas deportivas diseñados para mujeres y para hombres?. - ¿Son los pies de ambos sexos diferentes anatómicamente hablando?. - ¿Puede un hombre calzar una zapatilla de mujer y viceversa?. - Y la más importante: ¿por qué los modelos diseñados para mujer siempre tienen los colores más atractivos?... Bromas aparte, he buscado información en la gran enciclopedia virtual llamada Internet y he encontrado algunos asuntos interesantes. Al margen de la gente que habla amparada en los grandes dogmas podológicos preestablecidos, defendiendo que todo pie humano viene "mal" por naturaleza (pronador, neutro o supinador) y hay que etiquetarlo para poder prescribirle una plantilla correctora, una cuña, una sujeción o cualquier otro "aditivo" que no consigue más que esquilmar el bolsillo del paciente y enmascarar su verdadero problema (la mala educación que ha sufrido el pie durante años), al margen de las supuestas deformidades congénitas del pie (plano, cavo, talo, valgo, varo...), y al margen de las enfermedades neurológicas o de cualquier otra índole que puede sufrir el pie humano, no he logrado encontrar diferencias anatómicas entre los pies de una mujer y los de un hombre. Obviamente, por norma general (que no por ley natural) se dan una serie de características propias de cada sexo, como por ejemplo la mayor anchura del pie masculino sobre el pie femenino o la mayor altura del arco plantar en las mujeres, pero bajo mi punto de vista, no se pueden contemplar como diferencias anatómicas propias de un sexo o el otro. No obstante, que quede claro que lo que digo es opinión personal, ya que hay estudios que sostienen que dichas diferencias deben ser tenidas en cuenta para el diseño del calzado deportivo. - ¿Por qué "no estoy de acuerdo" con dichos estudios? Evidentemente no pongo en tela de juicio la labor de investigación de los profesionales ni sus conclusiones, faltaría más, pero sí tengo la opción de hacerles caso o no; de eso me di cuenta hace tiempo cuando empecé a correr descalzo y a usar zapatillas minimalistas. Bien, si a día de hoy fuera un corredor "al uso", es decir, si fuese una persona que entrenase o compitiese con zapatillas tradicionales (amortiguación, soportes, correcciones de pisada, etc), probablemente tendría en cuenta los datos de estos estudios y las opiniones de los profesionales a la hora de usar unas u otras zapatillas, obligado por la supuesta deformidad de mi pie (siempre hay alguna para los podólogos o traumatólogos), pero como lo único que miro en una zapatilla es su flexibilidad, su forma anatómica (real) y su ligereza, no tengo problemas. Aparte de esto, creo profundamente en la gran variedad de colores y formas que presenta la raza humana, siendo cada uno de nosotros únicos -con los pies incluidos-, así como en la indiscutible labor de la Naturaleza a la hora de crear los seres que pueblan este mundo. ¿Por qué iba a existir un ser -supuestamente el más desarrollado-, con las extremidades "defectuosas"?. Si seguimos los datos de los estudios, indican que sólo un 40% de los corredores tienen el pie "neutro", es decir, sin ningún tipo de desviación, o sea que esos mismo estudios están certificando que el 60% restante de los corredores vienen con defectos "de fábrica"... Es, cuando menos, sospechoso, ¿no?... ¿E históricamente?... ¿qué me dicen?... ¿alguno se ha parado a analizar el tipo de calzado que ha usado el ser humano para caminar (y correr, por necesidad) durante su historia?... ¿llevaban algún tipo de elementos correctores o de sujeción?... Además, ¿sólo hay que tener en cuenta estas "deformidades" a la hora de correr?... ¿por qué los zapatos "de calle" no están diseñados para según qué tipo de pie?, máxime cuando la gran mayoría de gente corre con la misma mecánica de apoyo del pie que como cuando camina (talón)... Alguno dirá, ..."es que al correr se generan otras fuerzas, otros impactos que requieren una protección extra para el pie"... Y con esta frase vuelve a poner en tela de juicio a la madre Naturaleza, presuponiendo que no diseñó al humano para correr... Y aquí, por fin, llegamos al punto clave: ¿Nacimos para correr?... Sin leer el best-seller y utilizando la lógica, ya tengo mi respuesta. Prefiero "desconfiar" de un estudio que de la Naturaleza Basándome en estas premisas, y volviendo al tema, llego a la conclusión de que un corredor minimalista puede usar una zapatilla de mujer, y viceversa, sin ningún tipo de objeción; así de sencillo.Lo único que hay que tener en cuenta es la comodidad a la hora de calzarlas, el resto es accesorio. Los que no estén de acuerdo deberán hacer caso a las recomendaciones de los fabricantes de calzado deportivo (minimalista o no) y elegir el calzado más acorde con el tipo de pie. Yo mientras, intentaré en el próximo par de zapatillas que me compre, elegir un color diseñado "sólo para mujeres"... Salud! Referencia 1. Referencia 2. Referencia 3.
16 sept 2012
Me duelen las rodillas al correr...
Lo siento, pero de momento no tengo nada que ver con este vídeo, y por lógica, con ningún dolor de rodillas... Salud!
11 sept 2012
¿Iron...qué?...
Si te gusta el deporte, si te gusta el triatlón, si crees que el Ironman es "lo máximo", si sabes apreciar la belleza de los paisajes nórdicos o si eres mínimamente sensible, te ruego encarecidamente que "cheques" este vídeo. Se trata de un pequeño resumen del Norseman, un triatlón extremo, con distancia Ironman (3,8k a nado+180km en bicicleta+42km corriendo) pero disputado en condiciones meteorológicas durísimas, salvando una distancia de 5000 m entre la salida y la llegada, y para colmo, cada corredor debe llevar su propia asistencia... Ahí es nada. Salud! Pd1: Si quedaste impresionado (como yo) con el vídeo, en el apartado "Hints & Tips" de la web del evento hay seis vídeo más que no tienen desperdicio. Pd2: Gracias a Santa Cruz por enseñarme esta prueba que obviamente desconocía.
10 sept 2012
La carrera popular donde todo empezó.
Ya conté el otro día, el año pasado por estas fechas estaba corriendo mi primera carrera popular, y este fin de semana volví a disputar la misma prueba, convirtiéndose así en la única que he repetido hasta ahora. El principal atractivo de la carrera estaba en saber si el año de entrenamientos que separaba ambas participaciones se vería reflejado en el tiempo final de la prueba. De resto, nada nuevo: las siempre agradables sensaciones de correr por las calles de mi ciudad, los mismos de cada carrera popular en los primeros puestos de las clasificaciones y lograr pasar un buen rato, aunque a decir verdad, la presencia de mi padre en la línea de salida le aportaba un inestimable valor al momento... Como siempre y para no aburrir, me ahorraré crónicas y detalles sin interés. Simplemente comentar que se trataba del mismo circuito que en ediciones anteriores - 8 km por asfalto y adoquín - y que partía con la referencia del tiempo logrado el año pasado: 42:49 (oficiales), lo que arrojaba un ritmo de 5,21 min/km, que no estaba mal para aquella época. Este año me dije a mi mismo que por lo menos tenía que bajar de los 40 minutos, asegurándome así llevar un ritmo máximo de 5 min/km, pero que básicamente iba a intentar "correr" algo, ya que el año pasado acabé muy relajado... Sin mirar el reloj ni una sola vez, me impuse el ritmo que creí adecuado para lograr mi objetivo, dejándome guiar por el cuerpo y tomando como referencia las sensaciones que tengo mientras entreno... Al final acabé en 36:57 (oficiales), revelando unos buenos 4:38 min/km de ritmo medio. Las sensaciones fueron bastante buenas y aunque no acabé como el año pasado en que casi parecía que había regresado de dar un paseo, no entré en meta con la cara de verdadero sufrimiento con que llegaban algunos, lo que me indica que todavía puedo (y quiero) correr más. En definitiva, me quedo con lo importante: casi 6 minutos de mejora de un año a otro, lo que significa que sí, el año de entrenamientos ha "servido" para algo. La anécdota fue que mi padre sigue en racha y ya casi va a podio por carrera; esta vez quedó tercero de su categoría (con casi el mismo tiempo que marqué yo el año pasado...) llevándose un trofeo y un vale en artículos deportivos... No hay quien lo pare. Si todo sigue igual, supongo que el próximo año estaré otra vez en esta carrera popular, celebrando otra vez mi "bautizo" e intentando "rascar" algunos segundos al tiempo sin perder la sonrisa. Salud!
4 sept 2012
El calzado deportivo como instrumento de separación
Uno de los temas que más suscitan mi atención en relación al mundo del running es el movimiento barefoot/minimalista. Como saben, desde que empecé a correr hace algo más de un año y medio, lo llevo haciendo según los preceptos de este movimiento, abandonando la amortigüación, y por ende, cambiando la forma de correr que ésta te proporciona. En ese tiempo en el que comencé a correr, también abrí esta pequeña ventana al mundo digital buscando motivación para ayudarme a no abandonar. Al principio, casi todos mis escritos en este blog estaban basados en la defensa a ultranza del barefoot/minimalismo, manteniendo en mente la idea de compartir experiencias y desde mi humilde posición de novato, mostrar al resto de la comunidad de corredores la manera en que yo estaba llevando mis entrenamientos, cómo corría, mis sensaciones cuando lo hacía descalzo o con zapatillas minimalistas, etc. Después de haber tenido múltiples quebraderos de cabeza y discusiones "digitales" con algún intransigente que otro, comprendí que este tema es como todo lo demás: cada uno tiene su manera de verlo y por mucho que se intente, nada hará que algunos cambien de opinión. Además, también entendí que adoptar el papel de "defensor" del movimiento barefoot/minimalista mediante aportación de datos científicos, estudios, documentos, traducciones, etc, no sólo me restaba ingentes cantidades de tiempo y esfuerzo, sino que además, me trajo más "problemas" que satisfacciones y al final todo resultaba ser absolutamente inútil; a excepción de unos pocos que siempre han mostrado interés, para el resto de lectores, todo esto del barefoot/mnimalismo es una simple anécdota que recordarán con sorna dentro de unos años. Aunque evidentemente sigo creyendo a pies juntillas en el "movimiento", no sólo porque lo practico casi a diario sin haber tenido el más mínimo problema físico, sino porque veo que la cosa crece -de manera exponencial en países desarrollados y a menor velocidad en España-, adoptar esta postura de permanecer en el oscurantismo mediático me ha ayudado a ver todo el asunto con otros ojos; me ha reportado paz y sosiego aunque sea renunciando a mi natural vocación de compartir experiencias y enseñanzas. Hasta en esto la egoísta sociedad actual dicta sentencia... Todo este rollo, además de rellenar espacio en el post, sirve de introducción al tema que quiero poner sobre la mesa en el día de hoy. Se están dando casos, pocos aún, de la creación en algunas carreras populares (predominantemente de montaña) de una categoría barefoot/minimalista que compite aparte de la categoría normal. La Cursa de la Diada o la Roncesvalle-Zubiri y alguna más que se me escapa, son algunos ejemplos de esta tendencia. Mi opinión al respecto no es muy positiva: en las carreras populares, sólo creo en la separación de sexos, edades y distancias y no en según qué te pongas en los pies. Aunque a priori pueda ser una iniciativa interesante y original, no la apoyo, y quedando claro que soy un defensor del movimiento barefoot/minimalista, lo soy para que haya una total integración del mismo, como una opción más, en el mundo del running, y no para que se siga mirando como una curiosidad o como una anécdota. Me parece contraproducente, hacer distinción entre calzado minimalista y tradicional en las carreras populares, demostrando así que no pueden ir "de la mano" ambas opciones. En definitiva, que cada uno corra como le de la real gana sin haber distinciones; el que lo haga más rápido, gana, y el que disfrute más, gana también. Es fácil... La clave está, creo yo, en que el deporte debe ser un medio de unión y comunión y no de separación, lleves el calzado que lleves. Además, según mi opinión, correr en categorías separadas es otro argumento para los anti-barefoot/minimalista (que los hay, y muchos); es reconocer que con este tipo de calzado no se pueden lograr los mismos objetivos (de marcas o distancias) que con calzado tradicional. Olvidándonos de temas meramente comerciales como el patrocinio de la categoría barefoot/minimalista por parte de una marca o tienda de calzado deportivo, no le veo el sentido a todo este tema... Soy consciente de que mis pensamientos y reflexiones son a menudo bastante radicales, y que muchas veces tengo que hacer el ejercicio de alejarme del asunto para lograr ver una perspectiva más objetiva, pero en este caso, no consigo llegar a ella. Además, se podría decir que estoy jugando el papel de abogado del diablo, ya que estoy criticando (en el buen sentido de la palabra) algo que defiendo, pero mi deber y honestidad me hacen expresar mi verdadero sentir en todo esto... ¿Alguien opina como yo, o sigo siendo un extraño en tierra de nadie?... Salud! Foto Original: http://lindadoke.blogspot.com.es/ Montaje: La Gazza Ladra
3 sept 2012
La siguiente
Cómo pasa el tiempo. El próximo sábado (si las cosas siguen su azaroso y natural curso), cuando esté corriendo la nueva edición de la Carrera Popular del Santísimo Cristo de La Laguna, se cumplirá un año de mi estreno en estas lides de ponerme un dorsal. Todavía recuerdo lo bien que lo pasé; la sonrisa que mantuve desde que se dio la salida hasta que llegué a meta; lo tranquilo y relajado que corrí (si a aquello se le podía llamar correr); la alegría que me daba ver a mi familia animando en cada esquina del recorrido; la satisfacción de verme "moviendo el esqueleto" después de años y años de sedentarismo; las caras de algunos mirando de reojo mis Fivefingers... Seguramente, en esta próxima edición habrá un par de cosas que cambien: -Salvo lesión o abandono por otra causa, la lógica me dice que haré mejor tiempo. -Si finalmente se decide a participar, tomaré la salida con mi padre, lo que engrandecerá mi carrera y mi satisfacción. -Probablemente no acabe con la sensación aquella de... "¿ya se acabó?" que tuve el año pasado. Lo que espero que no cambien sean todas las buenas experiencias que tuve corriendo por mi ciudad natal, lugar habitual de mis entrenamientos, acompañado por otras personas con la misma ilusión que yo... Ya contaré cómo me fue. Salud!